La amenaza de lluvia no fue obstáculo para la estación penitencial organizada por la cofradía de Nuestra Señora de la Soledad, que sin embargo acortó su recorrido
Ávila acompaña a la Soledad
La amenaza de lluvia no fue obstáculo para la estación penitencial organizada por la cofradía de Nuestra Señora de la Soledad, que sin embargo acortó su recorrido
El tiempo ha respetado este sábado a la última de las procesiones penitenciales de la Semana Santa de Ávila, la procesión de la Soledad, que aunque no ha sufrido las incelemencias meteorológicas sí ha sido víctima del miedo a la lluvia y ha recortado su recorrido.
A las siete de la tarde en punto se abrían las puertas de San Pedro Apostol para dar comienzo a la estación penitencial del Sábado Santo, organizada por la cofradía de Nuestra Señora de la Soledad.
Abría la comitiva, como es tradicional, una representación de la Hermandad del Santísimo Cristo de los Estudiantes y María Santísima Sede de la Sabiduría. Detrás, el primero de los pasos, la Cruz Desnuda (1993), que provocaba unos minutos de parón nada más salir de San Pedro cuando se soltaba una de las lanzas apoyadas en su base.
Las Damas de la Soledad, de traje negro con mantilla española para las mujeres y traje negro con camisa blanca y corbata negra para los hombres (la cofradía es mixta desde 2019), iban seguidas de los siete nazarenos con banderines que plasman los Siete Dolores de la Virgen y que precedían el paso de Nuestra Señora de la Soledad (1958).
Tras salir de San Pedro, el desfile procesional se ha dirigirdo hacia la C/Comandante Albarrán, C/Don Ferreol, Plaza Italia, Plaza Nalvillos, C/ Doctor Luís Lobera, Eduardo Marquina y C/Arturo Duperier hasta llegar a la Ermita del Humilladero, sede de la cofradía de la Santa Vera Cruz, en la Avenida de Portugal, donde ha tenido lugar la tradicional estación ante el Santísimo Cristo de los Ajusticiados.
Desde ahí, la procesión ha tomado la Calle San Segundo para llegar directa de nuevo al Mercado Grande y regresar a San Pedro Apostol, recortando el trayecto intramuros previsto por temor a la lluvia.
Las túnicas de las hermandades abulenses se han despedido así de las calles de Ávila hasta el año que viene, y solo queda este domingo la procesión del Resucitado, que partirá de la Iglesia de la Sagrada Familia tras la misa de 11 para celebrar el encuentro de Cristo resucitado con su madre, Nuestra Señora del Buen Suceso.
Las precipitaciones han caído con fuerza a las 21:00 horas, cuando se iban a unir las procesiones en la calle Teniente Arévalo
Ha tenido lugar en la iglesia de San Juan Bautista tras el traslado del Santísimo Cristo de las Murallas
La procesión recorrió la parte antigua de la capital con salida y llegada a la Catedral