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Con los votos del PP y de Vox se ha aprobado este martes en las Cortes de Castilla y León la Ley de Presupuestos autonómicos para 2024, sin que se hayan aceptado ni unan de las cerca de 2.400 enmiendas que habían mantenido los grupos de la oposición para debatirlas ante el pleno.
Tras más de quince horas de debate parlamentario, los grupos que sustentan al Ejecutivo autonómico han defendido las cuentas por considerarlas buenas para la Comunidad y los de la oposición las han atacado al no responder a las necesidades, en ambos casos con los argumentos ya esgrimidos tanto en el debate de totalidad como en la comisión, sin que haya prosperado enmienda alguna en este último trámite, publica EFE.
Cuando se publique en el Boletín Oficial de Castilla y León, el presupuesto dotado con 14.562 millones de euros, el 5,45% más que lo previsto para 2023, las cuentas quedarán aprobadas, aunque su efecto retroactivo llegará hasta el 1 de enero.
Los sucesivos portavoces parlamentarios en las diferentes áreas han intercambiado y reiterado argumentos, algunos de ellos entre reconocimiento de desazón por comprobar que las palabras utilizadas en el debate han carecido de efectos prácticos y no se ha modificado partida alguna.
En la votación de cada una de las secciones -correspondientes a los diferentes departamentos del Ejecutivo autonómico- se ha apreciado el tedio de los parlamentarios, con algunos momentos de tensión por las inevitables dudas que surgen en este tipo de trámites repetitivos.
El presidente de las Cortes, Carlos Pollán, ha seguido el guión establecido y, aunque en algunos momentos ha tenido que detener la marcha ante las dudas surgidas entre los parlamentarios sobre el punto que estaban votando, finalmente los presupuestos han salido adelante sin errores en la votación.
Los grupos minoritarios de la oposición han manifestado sus quejas por las formas en este debate presupuestario, especialmente por el rechazo de la totalidad de las enmiendas presentadas y también por el 'vacío' mantenido por el PP hacia el procurador del Grupo Mixto y exvicepresidente de la Junta, Francisco Igea.
Visiblemente afectado, Igea ha lamentado que el Grupo Popular mantenga el silencio y no responda a sus intervenciones en el Parlamento autonómico: "Estamos aquí para servir a los ciudadanos no para odiarnos", ha espetado en un momento en el que estaban debatiéndose enmiendas sobre cuidados y servicios sociales, publica EFE.
Tras lamentar el "paripé" en que ha visto convertido este debate parlamentario, el procurador del Grupo Mixto Pedro Pascual (Por Ávila) ha respaldado a su compañero de bancada, convencido de que "hay límites que no se deben superar", añadiendo que "estamos aquí para trabajar juntos, no para odiarnos".
Por su parte, el portavoz de Soria Ya, Ángel Ceña, ha considerado "una agresión" que PP y Vox hayan rechazado la totalidad de las enmiendas presentadas por la oposición ante el pleno de las Cortes.
El representante de Podemos, Pablo Fernández, se ha ausentado del pleno por la tarde, indispuesto al sufrir fiebre, por lo que las enmiendas que tenía pendientes de defender para la sesión vespertina decayeron al no poder plantearlas
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