El Tribunal Superior de Justicia (TSJCyL) ha confirmado una sentencia de la Audiencia Provincial de Ávila que condenó a un hombre a seis años de prisión por un delito continuado de abuso sexual, cometido contra una menor, que tenía 10 años en el momento de los hechos y que era nieta de la entonces esposa del procesado.

La resolución judicial de la Audiencia ahora ratificada, señala EFE, consideró hechos probados que del 13 al 15 de abril de 2017, coincidiendo con las vacaciones de Semana Santa, la víctima fue a pasar unos días a una vivienda situada en un pueblo de la provincia abulense.

La menor fue acompañada de su abuela, la hija menor de ésta, y del acusado, nacido en 1965, quien por entonces estaba casado con la abuela de la niña.

La vivienda donde todos ellos se alojaron pertenecía a la familia del acusado y disponía de varias habitaciones y una de ellas, que contaba con dos literas, fue asignada a la menor para que durmiera sola en ella.

Entre el 13 y el 15 de abril de 2017, en tres ocasiones, el acusado accedió a la habitación donde dormía sola la menor, a la que realizó tocamientos.

En una de esas tres ocasiones, sobre las 7 horas del 15 de abril, el encausado fue sorprendido por su esposa cuando estaba sentado en el lateral de la cama donde dormía la menor y, cuando la mujer le preguntó qué pasaba, el procesado se levantó rápidamente y se dirigió al armario de la habitación, al tiempo que decía que había ido a la habitación a coger su ropa.

Tocamientos

Esa misma mañana, cuando la menor se levantó de la cama sobre las 9 horas, se dirigió a la cocina donde estaba su abuela a la que dijo que estaba "muy triste" porque el abuelo le había hecho tocamientos.

Fue entonces cuando la mujer se dirigió a su esposo para recriminarle lo que había hecho, ante lo que el acusado contestó que lo que contaba la niña era mentira.

La abuela de la víctima contó a uno de sus hijos lo ocurrido pasados unos quince o veinte días y éste, tío de la menor, se lo dijo a los padres de la víctima, quienes el 7 de mayo de 2017 decidieron interponer la denuncia correspondiente ante la Guardia Civil.

La Audiencia condenó en concreto al procesado por un delito continuado de abuso sexual a menor de 16 años a la pena de prisión de seis años y a la prohibición de aproximarse a la víctima, debiendo guardar una distancia respecto de ella no inferior a 500 metros, su lugar de residencia, de estudios o cualquier otro lugar donde pudiere hallarse, así como comunicar con ella por cualquier medio, durante 15 años.

Libertad vigilada

La sentencia también estableció una medida de libertad vigilada por tiempo de 10 años, que se ejecutará con posterioridad a la pena privativa de libertad e inhabilitación especial para cualquier profesión, oficio o actividades, sean o no retribuidos, que conlleve contacto regular y directo con personas menores de edad, por tiempo superior en cinco años al de la duración de la pena de privación de libertad impuesta en la resolución.

El encausado deberá además indemnizar a la menor, a través de sus representantes legales mientras ella sea menor de edad, en la cantidad de 10.000 euros, añade EFE.