En la tarde de este viernes ha tenido lugar la presentación de los resultados de las dos campañas de excavación realizadas en el Cerro de la Mesa o de los Santos, en la localidad de Navarrevisca, y que han sido posibles gracias a dos partidas de 40.000 euros cada una de la Diputación Provincial.

Sobre el terreno, la alcaldesa de Navarrevisca, Leticia Sánchez, ha recordado los hallazgos más relevantes encontrados en el yacimiento, cuya extensión es de 2,70 hectáreas. Además del despoblado de San Pedro y demás tumbas antropomorfas, ubicadas todas en periodo de excavación durante todo el 2020 y que continuarán en todo el 2022.

El proyecto de excavación se plantea como respuesta a necesidad de investigar el pasado histórico de la zona, desde época visigoda hasta la alta Edad Media, épocas donde estaría poblado este conjunto.

El Cerro de la Mesa es un cerro sagrado desde la Prehistoria con tres templos de origen laico pertenecientes a la época visigoda y románica, asociado a una peña sacra que existe en el lugar fundado como mausoleo de la clase socialmente más prestigiosa de ese momento, la visigoda.

La principal hipótesis que está por contrastar en estas excavaciones es si el Cerro de la Mesa corresponde al lugar de todos los santos donde estaban enclavadas las ermitas de San Pedro, Santa Marina y Santa Coloma.

Por ello, Sánchez ha hecho hincapié en la primera fase, donde aparecieron los primeros elementos metálicos, entre ellos la hebilla visigoda que fue elegida como símbolo del yacimiento y la aparición de la primera tumba exacavada en roca, además de otros restos arqueológicos y metálicos. Todo un conjunto funerario que se completó con restos de tumbas y restos de ajuar que despejaban las incertidumbres previas.

Un templo visigodo con un claro contexto funerario y reconstruido en la época románica con la terminación de la cabeza absidiada, en ?un hallazgo de gran relevancia en el ámbito científico y cultural?, ha asegurado Sánchez.

Sobre el terreno se continuó con una segunda excavación para consolidar las estructuras sacadas a la luz en una extensión de 440 metros cuadrados con distinción entre dos fases constructivas, una hispano-visigoda propia del siglo VII- inicios del siglo VIII con un contexto funerario asociado a un Panteón funerario de origen laico y otra plenomedieval, que coincide con la llegada de los repobladores a la comarca y que coincide con la desaparición de todo el contexto funerario del templo. Para la comprensión del yacimiento, los investigadores han realizado una reconstrucción en 3D del templo y la investigación en el cerro sigue abierta.

Por su parte, el presidente de la Diputación de Ávila, Carlos García, ha anunciado que de cara a 2023 se iniciará una tercera fase de excavaciones, con la firma de otro convenio de 40.000 euros con el objetivo de ?conocer nuestras historia, nuestras raíces, buscando la dinamización social, cultural y económica de la provincia?.