circle
24h

Cebreros recuerda los riesgos del terrorismo en una democracia naciente

El Centro Adolfo Suárez de Investigación de las Transiciones Democráticas y la UNED analizan en un seminario el impacto del terrorismo durante la Transición

imagen
Cebreros recuerda los riesgos del terrorismo en una democracia naciente
Javier Ruiz-Ayúcar
Javier Ruiz-Ayúcar
Lectura estimada: 3 min.
Última actualización: 

El Museo Adolfo Suárez y la Transición de Cebreros (Ávila), el pueblo de Adolfo Suárez, ha expuesto cómo el terrorismo tuvo "riesgos ciertos" sobre un proceso de transición que, a diferencia de otros países, en España contó con "una dimensión mucho más peligrosa", teniendo en cuenta que se ponía en riesgo una democracia que estaba naciendo.

Esta reflexión ha sido realizada en declaraciones a los periodistas por el director de la Fundación Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez, poco antes de asistir a la inauguración de la muestra 'Rolando 2:15-2:45: 50 años de la primera masacre de ETA'.

Esta exposición muestra uno de los episodios más trágicos de la historia reciente, el primer atentado indiscriminado cometido por la banda terrorista ETA en la cafetería Rolando de Madrid, el 13 de septiembre de 1974, causando 13 muertos y 70 heridos.

La exposición, que llega a Cebreros tras haber recorrido otros diecisiete lugares, ha sido inaugurada antes de la celebración de una jornada sobre el impacto del terrorismo en la transición, organizada por el Centro Adolfo Suárez de Investigación de las Transiciones Democráticas y la UNED de Ávila.

Ambos eventos han contado con la asistencia del alcalde de Cebreros, Pedro José Muñoz, el presidente de la Diputación, Carlos García, y el rector de la UNED, Ricardo Mairal, quien se ha referido a este Centro de Investigación como un lugar de "diálogo", que reivindica algunos de los legados de Suárez, entre los que también ha citado al "pacto" y al "encuentro".

Según ha apuntado a los periodistas, esta exposición recuerda "uno de los periodos más tristes" de la historia reciente de España, al mismo tiempo que reivindica que la muestra sirva para rememorar lo que sucedió para que "jamás vuelva a pasar".

Entre las intervenciones posteriores se encontró la de Florencio Domínguez, que ha impartido una conferencia titulada 'Vidas rotas en una sociedad rota', dentro del Museo Adolfo Suárez y la Transición, donde ha señalado que el terrorismo "se multiplicó precisamente a partir de la transición".

Si entre 1960 y finales de 1975 se contabilizó un total de 63 muertos en atentados terroristas en España, desde 1976 a 1978 esa cifra "se duplicó" como "preámbulo" a los denominados "años de plomo", cuando ETA asesinó a más personas.

Según Domínguez, el 95% de los asesinatos de la banda terrorista fueron perpetrados a partir de la muerte del dictador Francisco Franco.

Una transición con más mérito

Por ello, el director de la Fundación de la Fundación Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo ha considerado que "la transición tiene más mérito", ya que se tuvo que realizar "en medio de una situación de acoso terrorista y de violencia muy potente, sin igual en otros países europeos".

En este contexto, ha explicado que en otros lugares también hubo terrorismo, Sin embargo, esa situación se daba "en democracias asentadas", a diferencia de España, donde era incipiente el nacimiento democrático.

Por ello, Florencio Domínguez ha manifestado que el terrorismo "ponía en peligro el camino a la democracia" y, en su opinión, hubo "riesgos ciertos" de que la transición se viera frustrada por esta circunstancia.

"Afortunadamente la democracia se impuso sobre los violentos", ha explicado Domínguez, quien ha subrayado que en España las circunstancias fueran "más complicadas de superar que en otros países de Europa" en los que "no se ponía en peligro la democracia".

En ellos se producía "una respuesta de unas instituciones sólidas, acreditadas, asentadas", a diferencia de España, donde "se estaba construyendo la democracia desde cero" y el terrorismo generaba "desestabilización, amenazas e intentos de golpe de Estado como el 23 de febrero de 1981".

Por todo ello, Florencio Domínguez ha opinado que "la amenaza del terrorismo en España tenía una dimensión mucho más peligrosa que en el resto de otros países", pudiendo haber llegado a truncar la transición.

En este sentido, ha destacado que "afortunadamente el grueso de las Fuerzas Armadas permaneció fiel a la legalidad democrática".