En el primer trimestre de 2025 se efectuarán los pagos relativos a las ayudas asociadas al engorde de terneros
El Consejo de la Unión Europea de Agricultura aprobó este lunes las líneas maestras de la Política Agrícola Común (PAC) que entrará en vigor a partir del 2027. Entre los objetivos principales, los estados miembros del bloque europeo pretenden que el plan potencia la competitividad del sector primario de la Unión Europea, fortalezca la seguridad alimentaria de los europeos y asegurar al mismo tiempo un nivel de vida justo para la comunidad agrícola y precios razonables para los consumidores.
"Las conclusiones reflejan las expectativas del Consejo para la futura Política Agrícola Común, aspirando a potenciar a un sector agricultor competitivo. Las conclusiones piden recursos específicos y adecuados para que la PAC responda eficazmente a sus múltiples objetivos", declaró István Nagy, el ministro de Agricultura de Hungría, que es el país que ostenta la Presidencia temporal del Consejo de la Unión Europea durante este semestre.
De hecho, a partir de estos objetivos y líneas maestras marcadas por los estados miembros, ahora la Comisión Europea, el Consejo de la Unión Europea y el Parlamento Europeo tendrán que negociar y aprobar una nueva PAC. Se trata de uno de los principales planes anuales del bloque europeo, supone cerca de una tercera parte del presupuesto anual de la Unión Europeo y se benefician sobre todo regiones con un sector agricultor y ganadero destacado, como es el caso de Castilla y León.
En este sentido, los ministros de Agricultura de la Unión Europea piden que se dote de los recursos suficientes a la PAC para garantizar "que pueda responder eficazmente a sus múltiples objetivos", según un comunicado de prensa emitido este lunes por el Consejo de la Unión Europea. Entre otros, los estados miembros acordaron que, a través de los pagos directos a los agricultores y otras formas de ayuda, la PAC "debe contribuir a garantizar que los agricultores tengan unos ingresos estables y ofrecerles incentivos para contribuir a la transición ecológica".
Además de este punto, los ministros de Agricultura también reconocieron la "tendencia negativa al envejecimiento de la población agrícola" y "la importancia de una renovación generacional suficiente". Así, los estados miembros acordaron que debe reforzarse el apoyo a los jóvenes agricultores y a los nuevos agricultores para contribuir a garantizar que el sector siga siendo atractivo para las generaciones futuras. También se reivindicaron las pequeñas explotaciones y la participación de las mujeres en el sector como elementos importantes para la viabilidad de las zonas rurales.
Las líneas maestras de la PAC acordadas también piden normas más favorables a los agricultores y subrayan la necesidad de reducir la burocracia y simplificar los procedimientos. En este sentido, los ministros piden un procedimiento simplificado y acelerado para aprobar y modificar los planes estratégicos nacionales de la PAC y aliviar las obligaciones de información de los agricultores a cambio de recibir las subvenciones europeas.
Además, los estados miembros subrayan que el sistema de seguimiento y evaluación debe ser "más eficaz, transparente y simplificado", y que el sistema de control y sanción "no debe aumentar el número de controles sobre el terreno" para evitar incrementar el trabajo burocrático de los agricultores y ganaderos.