El procurador de Por Ávila en las Cortes de Castilla y León, Pedro Pascual, ha lamentado el rechazo del Partido Popular y de VOX a habilitar una partida presupuestaria anual para que la Administración regional colabore con los ayuntamientos de las Ciudades Patrimonio en la financiación derivada de soterrar el cableado aéreo existente en los cascos históricos de las mismas.

Pedro Pascual ha defendido esta miércoles una Proposición No de Ley (PNL) para instar a la Junta a colaborar con los consistorios de las tres Ciudades Patrimonio de la Humanidad de Castilla y León, Ávila, Salamanca y Segovia, en la financiación necesaria para soterrar el cableado aéreo existente en las fachadas de los edificios situados en el casco histórico.

Durante su intervención, Pascual ha explicado que, teniendo en cuenta la normativa vigente, está prohibido que el cableado aéreo de las instalaciones de suministro de electricidad o fibra óptica esté visible en las fachadas de los edificios y monumentos ubicados en los casos históricos de las Ciudades Patrimonio.

La solución a esto pasa por habilitar nuevas conducciones y soterrar, bajo calzadas y aceras, toda la red de cableado ya existente, algo que conlleva unos costes muy elevados, tanto para las arcas municipales como para las empresas instaladores, por lo que es esencial que la Junta de Castilla y León colabore económicamente con los Ayuntamientos de Ávila, Salamanca y Segovia.

Digitalización negocios

Pedro Pascual se ha referido, además, al contexto actual, el que la digitalización de los negocios es "clave" para garantizar su supervivencia y, del mismo modo, se hace imprescindible lograr la digitalización de las instalaciones turísticas y de los monumentos, con el objetivo, ha explicado, de que la fibra óptica llegue a todas las viviendas, monumentos y negocios situados en las zonas históricas de estas ciudades.

Pascual ha lamentado la negativa del Partido Popular y de VOX de sacar adelante esta iniciativa que, además, pretendía dar cumplimiento a una reivindicación histórica de las Ciudades Patrimonio Mundial, que llevaban años reclamando una medida de este tipo.