Las precipitaciones han caído con fuerza a las 21:00 horas, cuando se iban a unir las procesiones en la calle Teniente Arévalo
Por un Plan de Rescate para Ávila
El sindicato UGT pide al Equipo de Gobierno municipal del PP que reaccione ante la multitudinaria protesta del 14-N y exija con urgencia a los gobiernos autonómico y estatal un Plan de Rescate para Ávila
La Unión General de Trabajadores de Ávila pide al Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Ávila que atienda a la multitudinaria protesta del 14-N en Ávila y exija a los gobiernos autonómico y estatal, en manos de su mismo partido, que destinen con urgencia una partida específica a un Plan de Rescate para Ávila antes de que los presupuestos autonómico y estatal de 2013 surtan efecto y apuntillen definitivamente cualquier expectativa de desarrollo local y provincial.
La ciudadanía de Ávila, convocada por la Cumbre Social, en la que se integra UGT, manifestó pacíficamente el miércoles su rechazo y preocupación ante la catastrófica situación socioeconómica de Ávila.
En estos momentos, uno de cada cuatro abulenses está en paro y UGT prevé que las cifras del desempleo en Ávila se acerquen al 30% de Andalucía en el primer semestre de 2013; cada mes se cierran decenas de negocios; más de 4.000 jóvenes abandonarán nuestra provincia este año para trabajar fuera; miles de abuelos han perdido las ayudas para ser atendidos; los vecinos de esta ciudad y de su provincia no son operados hasta pasados muchos meses, más de un año en algunos casos, mientras el Hospital Provincial, recién remozado, se cierra parcialmente por falta de dinero; los abulenses se han quedado sin trenes pero con autopista de pago; se han quedado también sin su caja de ahorros centenaria; y sus colegios e institutos ven reducida a la mitad la asignación presupuestaria.
Los abulenses exigen soluciones
Lamentablemente, el Equipo de Gobierno, en lugar de escuchar este clamor y liderar el futuro de la ciudad, practica la estrategia del calamar, desacreditando -cuando no criminalizando- a los sindicatos y escudándose en la policía para indisponerla contra los convocantes; unas fuerzas de seguridad, por cierto, que cuentan con nuestro apoyo en su indignación con el Ejecutivo del PP por el recorte de sueldos y de derechos laborales.