A través de su cátedra de Cultura de Defensa 'Subintendente Julián Vallespín', en el palacio de Los Serrano
Fundación Ávila, a través del proyecto Reactiva Brañosera, ha puesto en marcha el plan formativo Escuela de Pastores para el cual ha contado con la colaboración del Centro de Capacitación Agraria de Ávila, quien ha cedido sus instalaciones para que pueda llevarse a cabo la parte teórica de esta formación.
Reactiva Brañosera es un proyecto liderado por la Fundación Santa María la Real y el Ayuntamiento de Brañosera, cuyo reto será generar conocimiento científico sobre la evolución de los paisajes de montaña, diseñar estrategias de manejo sostenible de bosques y pastos y mejorar los servicios ecológicos del municipio palentino. Para lograrlo contarán con el apoyo y la experiencia de Fundación Ávila y Universidad de Valladolid, además de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea-NextGenerationEU.
El pasado 21 de octubre comenzó en la provincia abulense la primera edición de la Escuela de Pastores, un programa de formación pionero en Castilla y León que contará con tres ediciones: dos en Ávila y una en Palencia. Esta iniciativa tiene como objetivo ofrecer una nueva salida profesional en el ámbito rural, revalorizando el oficio ancestral del pastoreo y destacando el papel fundamental que desempeñan los rebaños en la conservación de los montes y la prevención de incendios.
El proyecto busca no solo preservar el conocimiento tradicional de la ganadería extensiva, sino también fomentar el arraigo en las zonas rurales mediante la recuperación de la trashumancia, práctica que no solo favorece la limpieza de las vías pecuarias, sino que también promueve la biodiversidad y la sostenibilidad de los ecosistemas.
La formación pone en valor el papel de la ganadería extensiva en el mantenimiento de ecosistemas saludables, que son clave para la conservación de la biodiversidad y para la provisión de servicios ecosistémicos. La presencia de ganado en los montes ayuda a mantener la diversidad estructural de estos espacios, al controlar el crecimiento desmedido de matorrales, y enriquece los suelos a través de sus aportes naturales, favoreciendo una rica biodiversidad tanto vegetal como animal. Además, el ganado actúa como un elemento esencial en la creación de un paisaje en mosaico, lo que contribuye a la multifuncionalidad de estos ecosistemas.
Este tipo de paisaje no solo facilita la fijación de población en el ámbito rural, sino que también aumenta la resiliencia de los sistemas naturales ante perturbaciones, como los incendios forestales, y fortalece su resistencia frente a los efectos previstos del cambio climático.
La Escuela de Pastores, impulsada desde las administraciones locales en colaboración con entidades especializadas, se posiciona como una herramienta estratégica para revitalizar las zonas rurales a través de la educación en prácticas ganaderas sostenibles, asegurando así la continuidad de una labor clave para el equilibrio ambiental y el desarrollo socioeconómico de estas áreas.
El proyecto cuenta con 24 alumnos inscritos, 12 hombres y 12 mujeres, y la mayoría de los inscritos son jóvenes residentes en el medio rural. También hay autónomos pertenecientes a asociaciones del medio rural e interesados en esta nueva iniciativa.
La Escuela de Pastores comprende 40 horas de formación teórico/práctica con siete módulos formativos:
Módulo 1: Recursos naturales que nos ofrece la biodiversidad para el aprovechamiento por el ganado.
Módulo 2: El oficio del pastor y las nuevas tecnologías.
Módulo 3: Los rebaños.
Módulo 4: Fenología.
Módulo 5: La trashumancia.
Módulo 6: Los servicios ambientales del pastoreo.
Modulo 7: La cultura y el arte pastoril.