"VOX he hecho más en un año en la Junta que Por Ávila en cuatro"

El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, acudió este sábado a la capital abulense para arropar la presentación de la candidatura de VOX al Ayuntamiento de Ávila, encabezada por Juan Manuel Lorenzo Serapio y con Laura García y Fernando Toribio como números dos y tres de la lista respectivamente.

En un acto al que también asistieron la diputada Georgina Trías y el procurador en Cortes José Antonio Palomo, García-Gallardo se apuntó de forma directa a Por Ávila, el partido que ahora gobierna el Ayuntamiento y que también está representado en las Cortes, defendiendo que "VOX ha hecho más en la Junta de Castilla y León en un año que Por Ávila en cuatro".

Según García-Gallardo, "la ciudad de Ávila se subió hace cuatro años en un carro que parecía atractivo", decía en referencia a la victoria de la agrupación amarilla. "Se prometió que iban a cambiar mucho las cosas, y al final no cambió nada", lamentaba el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, para el que, además, "Ávila no sólo ha resuelto algunos de los problemas que tenía entonces, sino que los ha empeorado".

"Y este partido político", volvía a referirse a Por Ávila, "se aprovechó de las buenas intenciones de la gente, de sus promesas incumplidas, para que muchos se sumaran a ese proyecto que al final ha sido un fracaso", definía a la agrupación política encabezada por Jesús Manuel Sánchez Cabrera, a la que situó entre aquellos partidos políticos opuestos a VOX "que utilizan el medio ambiente como excusa para el decrecimiento de la economía". En el otro lado de la balanza, se situaría según García-Gallardo VOX, que apuesta por la defensa ?de lo nuestro, de los barrios? y que quiere, decía, "el desarrollo económico de pueblos y ciudades".

"Ávila no necesita una zona de baja emisiones. Ávila lo que necesita es vida, movimiento, gente joven, más comercios, industria, alguien que de verdad crea y apueste por la ciudad", enfatizaba ante los seguidores del partidos congregados en el Café del Mercado y ante los que aseguraba además que lo que no necesita Ávila es convertirse en un "parque de atracciones" del chuletón de fin de semana.

"Y que no nos digan que con esto estamos despreciando el turismo", quería dejar claro García-Gallardo que, lejos de eso, defendía la labor llevada a cabo por la Junta desde la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte. "Es que Ávila necesita alguien que cree un proyecto de ciudad", recalcaba el líder de VOX, para el que "eso no se consigue demonizando las emisiones de CO2" sino con "presupuestos y dedicación".

Medio Ambiente

Volvía de nuevo Gallardo en sus palabras a retomar el argumento del medio ambiente, para ponerse enfrente de aquellos que apuestan por "el fanatismo climático". "Necesitamos un partido que no se arrodille ante la burocracia de Bruselas", argumentaba. Un partido, como el suyo, decía, que "asegure un futuro para esta tierra" y que ponga a la familia en el centro de todas sus políticas.

"Sabemos que la familia es lo primero", apuntaba García-Gallardo, que no se cansaba de explicar que todo esto es "la defensa de lo correcto. La familia es lo primero. Sin familia no hay sociedad, ni barrio o pueblo que valga. Y lo que necesitamos es proteger esos núcleos de convivencia donde todos hemos aprendido siempre los mejores valores", proseguía hablando antes de asegurar que su partido "ha venido a dar una alternativa real y total a las políticas de la izquierda, y las vamos a derogar todas y cada una de ellas".

Por su parte, el candidato a la Alcaldía de Ávila José Manuel Lorenzo Serapio, agradecía encarecidamente la presencia de los miembros de su lista y la de aquellos que engrosan las de los pueblos de la provincia. "Nos dicen que no hay futuro, que no hay alternativa. Y en VOX decimos que no, que Ávila tiene futuro, que las cosas pueden cambiar", presumía Lorenzo Serapio, que contraponía el orgullo y la valentía con el que se presenta su agrupación al "miedo" que pretenden instalar las fuerzas políticas contrarias. 

"Miedo a vivir, a ser nosotros mismos, a decir la verdad?", enumeraba el candidato abulense. "Se ha acabado el miedo en Ávila. No va a ser fácil, pero la recompensa será grande", se despedía entre aplausos.