Éxito del deportista abulense del Club de Esgrima Santa Teresa de Ávila en la competición celebrada en Segovia
Remontada como antídoto al mal juego (3-2)
Los abulenses se sobrepusieron al inicial empuje leonés para firmar otra victoria que permite al Real Ávila seguir soñando con el playoff
El Real Ávila sumó en la tarde del domingo tres valiosísimos puntos ante uno de los gallitos de la categoría en el grupo octavo de Tercera División, el Júpiter Leonés. Los abulenses venían avisados de antemano del potencial del equipo norteño, que aunque no ocupa los puestos de arriba, demuestran en cada partido que juegan con los grandes, que jugar contra ellos es como visitar al dentista.
El Júpiter supo jugar de tu a tu en el lamentable tapete del Adolfo Suárez a un Real Ávila dubitativo e impreciso con el balón en muchas fases del juego, que tuvo la fortuna de cara, primero con un penalti dudoso a Diego Ortíz, y después en los dos únicos disparos a portería leonesa que acabaron en gol.Y es que el cuadro de Ramón González se puso muy pronto con ventaja en el electrónico, en el minuto 8, cuando Aaron mediante una galopada se libra por fuerza de tres rivales encarnados para cruzar con la diestra y con maestría el balón ante un impasible Alberto y poner el 0-1 en el partido.
Al Ávila le costó desperezarse, primero porque el control del partido seguía siendo leonés tras el mazazo, y lo segundo porque ni los mediocampistas, ni los defensas acertaban a sacar el balón jugado y conectar líneas de pase con los atacantes. Así las cosas, Mito tuvo el 0-2 con un fuerte disparo tras una pared con Altube, que atajaba Alberto como podía. Pero el choque cambió cuando el árbitro segoviano Maté Rincón decretó una pena máxima a favor del Real Ávila por derribo dentro del área de Diego Ortiz, que Peli con tranquilidad trasformó en el empate a uno.
Los despistes en la defensa y la valentía del filial de la Cultural y Deportiva Leonesa seguían siendo patentes, pero como diría Bujadin Boskov con esa frase típica de “fútbol es fútbol”, los de Jonathan Prado se fueron arriba sorprendentemente en el marcador en el minuto 42 cuando Sergio Ramos cabeceó a la red un gran centro de Edu desde la banda derecha.
El paso por los vestuarios agigantó un poco más a los encarnados que se veían con opciones más claras de llevarse el encuentro, pero la concesión de una falta peligrosa al borde del área la aprovechó Alex Díez por alto para rematar el empate a dos tantos. Prado, ante la necesidad de sumar imperiosamente los tres puntos para seguir la estela del Numancia B y el Astorga, metió a Iván Vila por Diego Ortiz y dejó a Juli en una clara apuesta por quemar las naves ofensivas.
Mayorga y De Mesa pudieron profundizar más su juego por la banda, y precisamente fue mediante una internada por la banda derecha del madrileño por donde llegó el gol de la victoria, cuando Juli aprovechaba dentro del área un gran pase del extremo para llevar el delirio a la parroquia abulense con el 3-2 final. Incluso pudo sentenciar al final si Vila llega a acertar en boca de gol un balón peinado desde la izquierda por Mayorga. Una semana más los abulenses siguen la estela de sorianos y leoneses, a 4 y 6 puntos respectivamente, para seguir en la sexta posición de la tabla clasificatoria.